ESBE LO HA VUELTO A HACER: LAS «BEST MANAGED COMPANIES» DE SUECIA 2021

«Este premio reconoce a las empresas que demuestran un liderazgo y un compromiso excepcionales para impulsar un crecimiento rentable. Tienen un enfoque deliberado para formar equipos sólidos e invertir en el desarrollo futuro de su talento», afirma Håkan Sjögren, miembro del jurado independiente y director general y responsable de las cotizaciones del Nasdaq Stockholm.

«Best Managed Companies» es un premio de calidad que reconoce el éxito general de las empresas privadas suecas en función de la dirección estratégica, la capacidad de ejecución, la cultura corporativa y el rendimiento financiero. «Best Managed Companies» se estableció en Canadá en 1993 y, desde entonces, se ha introducido en más de 20 países de todo el mundo. Deloitte lanzó «Best Managed Companies» de Suecia en 2018 en colaboración con Nasdaq. Este es el tercer año del premio. Un jurado independiente ha seleccionado las 13 empresas que han recibido el premio de este año.

Mantuvimos una charla con Peter Cerny, consejero delegado y consejero delegado del grupo de ESBE, para que nos diese su opinión sobre la distinción. 

¿Cuál fue su reacción espontánea cuando supo que ESBE había ganado el premio «Best Managed Companies» de Suecia 2021, por segundo año consecutivo? 

«En primer lugar, me sentí extremadamente contento y orgulloso de lo que todo el personal había logrado conjuntamente.

Al igual que tantas otras empresas de todo el mundo, hemos pasado una época complicada. Preocupación por la salud y el bienestar de las personas, pero también por otros efectos que ha acarreado la pandemia, que han afectado a la mayoría de las empresas de una forma u otra. A pesar de todo ello, hemos conseguido mejorar en un gran número de aspectos y estoy enormemente orgulloso por ello, desde la humildad».

 ¿Por qué cree que han conseguido volver a hacerse con el premio este año?
 
«En esencia, ESBE es una empresa muy bien administrada. Está en nuestro ADN esforzarnos constantemente por mejorar y alcanzar nuevos objetivos. Durante el último año, hemos trabajado activamente para mejorar nuestros procesos. Hemos continuado con nuestras inversiones a largo plazo en el desarrollo de productos y también hemos aumentado la capacidad de producción. Como resultado de este trabajo, tanto el volumen de negocios como nuestros resultados han mejorado. 

La respuesta que recibimos de Deloitte después del premio del año pasado fue que nuestros procesos están en orden y que tenemos un modelo financiero bien definido. Elogiaron nuestro trabajo a largo plazo y la cultura humanitaria que nos caracteriza como empresa. Nuestro modelo de participación en los beneficios y la posibilidad de que los empleados compren acciones en ESBE nos hacen únicos en muchos aspectos. Y somos una empresa que opta, y siempre ha optado, por devolverle a la sociedad en la que estamos activos.

En conjunto, se podría decir que ESBE es una empresa que ha sido objeto de un escrutinio minucioso y que ha tenido un excelente rendimiento en todos los ámbitos, lo que constituye la base para que recibamos esta distinción por segundo año consecutivo».

Además de «Best Managed Companies» de Suecia, ESBE también ha sido galardonada con el premio Export Hermes 2020.  ¿Puede explicarnos este éxito?

«Siempre es difícil elogiarse a uno mismo, pero nuestros esfuerzos, objetivos y visiones evidentemente han dado sus frutos. 

La visión a largo plazo siempre ha sido un lema para nosotros, junto con el liderazgo y la compasión. Trabajamos activamente para incorporar estas palabras clave en todo lo que hacemos. Y estos pilares esenciales no están solos: están fuertemente respaldados por el ahorro de energía, el confort y la seguridad. Juntas, estas consignas constituyen la base de todo lo que hacemos. Por supuesto, a esto podemos añadirle un arduo trabajo y una clara voluntad de simplificar las cosas. Y de cara al futuro, obviamente se trata de nuestra necesidad de desarrollar productos innovadores que satisfagan las estrictas demandas de nuestros clientes, a la vez que sean lo más inocuos y eficientes energéticamente posible para el medio ambiente».

Por último, para cualquier empresa deseosa de prepararse para ir a la caza de algunos premios codiciados, ¿cómo pueden hacerlo? ¿Tiene algún consejo concreto que darles? ¿En qué deberían pensar?
 

«El éxito no llama a tu puerta. Es necesario tener visión de futuro, con metas a largo plazo por las que trabajar. 

Hay que estar preparado para cambiar de rumbo cuando las cosas se tuerzan y asegurarse constantemente de que el crecimiento y la rentabilidad vayan de la mano, porque entonces puede invertir en el negocio. Es fundamental trabajar continuamente en las mejoras. Siempre hay algo que podría ser mejor. 

Y, personalmente, también creo que es importante no dar el éxito por sentado, sino seguir siendo humilde. El éxito es perecedero y las tornas pronto pueden cambiar. Evidentemente, deberíamos celebrar las victorias y disfrutarlas. Pero no hay que dormirse en los laureles: fíjese constantemente nuevas metas por las que luchar».